Zona habitable de una estrella
En los últimos años hemos sido capaces de encontrar multitud de planetas alrededor de otras estrellas. La distancia hasta ellas es tan grande que apenas hemos podido averiguar información sobre estos planetas; a veces, poco más que su masa y su distancia con respecto a la estrella.
Pero ¿en qué medida son aptos esos planetas para la vida? Para poder abordar esa pregunta hemos inventado un concepto: la zona habitable. Esta zona no es más que la distancia de una estrella a partir de la que el agua podría encontrarse en estado líquido sobre la superficie de un planeta. Y es que el agua, tal y como la conocemos, es fundamental para la vida.
Esta zona depende de lo luminosa que sea la estrella, ya que a mayores luminosidad y temperatura, más lejos se encontrará la zona, y viceversa. Sin embargo, las zonas habitables no lo son eternamente, ya que van cambiando con el ciclo de vida de las estrellas, normalmente de dentro hacia fuera. Los cuerpos que en los primeros millones de años parecen habitables pueden volverse inhóspitos para la vida.
Obviamente, el concepto de «zona habitable» es solo un comienzo, ya que hay muchos más factores que hacen que un planeta pueda ser habitable. Un planeta sin atmósfera no sería capaz en ningún caso de tener agua líquida estable sobre la superficie, ya que se evaporaría directamente al espacio. En cambio, puede haber cuerpos que sí sean habitables y no tengan atmósfera, como las lunas heladas de los gigantes gaseosos como Encélado o Europa, que podrían tener bajo su corteza de hielo océanos subterráneos alimentados por la energía interna del satélite.
📖#Fuente
"Un geólogo en apuros" - Nahúm Méndez